domingo, 5 de agosto de 2007

¿Perros o personas?

Actualidad
por Tiziana Crosara
miembro de la WSPA
(World Society for the Protection of Animals)
perrosprotegidos@hotmail.com
Perros de razas peligrosas o personas peligrosas
Las mordidas de gran impacto ocurren cuatro o cinco veces al año.
Los accidentes por mordeduras de perro son mayoritariamente provocados
por razas pequeñas y perros con dueño y lejos están sus estadísticas de otros tipo de accidentes ocasionados por humanos, aunque esto nunca es noticia.
Es el mismo perro, depende la imagen que se quiera transmitir de él…
Cada raza o cruza de perro tiene sus características y no por ser más potentes físicamente o de alguna raza son asesinos, como hacen ver erróneamente algunos medios de prensa.
La potencialidad de posible daño ocurre con todas las razas o cruzas; lo que hace factible esa peligrosidad es que por su temperamento agresivo den muestras o indicios de violencia y estén en manos de gente incapacitada para su manejo.
Mas allá de la naturaleza física, peso, tamaño, complexión, fuerza o mandíbula, todo dependerá del entorno en el que se críe y, por supuesto, de la educación recibida. En raras circunstancias, a pesar de haber dado una buena educación al perro, este podría ser agresivo por naturaleza; pues esto mismo ocurre con todas las especies animales y por supuesto también con la humana; donde existe un cerebro se da lugar a la posibilidad de algún tipo de trastorno.
Todo poseedor de un perro de gran porte debería tener un permiso que lo habilitara, una ley que lo responsabilizara y un seguro que respaldara sus posibles negligencias en el manejo de dichos canes. No es el caso de Uruguay, donde no hay ningún control ni responsabilidad sobre las crías o cruzas y la comercialización y tenencia de perros. El animal es como un arma, puede provocar un accidente pero no es el responsable.
Los responsables, hoy, cuando salta la alarma de perros que atacan, son nuestros legisladores que no legislan sobre una tenencia responsable y un control ético de poblaciones; los que crían y venden perros que en la mayoría de los casos no asesoran debidamente a los compradores y los propietarios que no asumen una madurez y responsabilidad para tenerlos.
Hay que legislar, pero sobre las personas, los animales no entienden de leyes y no se los puede penalizar ni condenar por negligencias o irresponsabilidades humanas.

No hay comentarios: